Afortunadamente, como puede ver en este video de apenas 5 minutos, o leer a continuación de forma extendida, los avances técnicos de última generación con los que contamos en Andromedi suponen una revolución en el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad.

¿Qué es y por qué se produce la Fuga Venosa?

Los pacientes que sufren impotencia masculina (o disfunción eréctil) pueden separarse en cuatro grandes grupos dependiendo de la naturaleza que la provoque: psicológica, hormonal, farmacológica o vascular. La Fuga Venosa, aunque puede tener origen multifactorial, corresponde principalmente a este último grupo, pues es descrito ante todo como un problema fisiológico. Son casos a veces muy duros anímicamente, pues hablamos que una persona joven de unos 23 años puede tener una D.E. severa, que le imposibilite mantener una vida sexual normal.

Para comprender qué es y por qué aparece esta dolencia, primero hay que recordar como consigue el organismo del hombre que el pene comience y mantenga una erección. La explicación es bastante técnica, por lo que intentaremos expresarlo brevemente con palabras comunes.

Una vez que la excitación sexual se produce por estímulos visuales, táctiles o sonoros, los sistemas nervioso y circulatorio elevan su actividad. Los vasos sanguíneos transportan sangre a todas las partes del pene y los denominados espacios sinusoidales actúan de compuerta para “apretar” las venas y poder mantener con ello la dureza de la erección. Es en este punto donde en algunos varones se produce la llamada Fuga Venosa o “fallo del mecanismo corporo-veno-oclusivo”, cuando estas zonas periféricas no se cierran correctamente, perdiendo la erección parcial o completamente pues la sangre escapa por motivos físicos (no de excitación) y no contribuye a la rigidez que supone la erección del pene.

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