La incontinencia urinaria en el hombre puede darse por diversas causas como, por ejemplo, traumatismos pélvicos, hiperplasia benigna de próstata, cirugías de próstata, trastornos funcionales vesicales que pueden relacionarse con ictus, enfermedad de Parkinson, lesión espinal, esclerosis múltiple o vejiga hiperactiva.
Sin embargo, la que tiene especial relevancia es la incontinencia de esfuerzo, que suele relacionarse con intervenciones quirúrgicas sobre la próstata que afectan el mecanismo esfinteriano. En este sentido, la prevalencia de incontinencia urinaria tras prostatectomía radical en práctica clínica se estima en torno al 30% durante las primeras semanas tras la cirugía pero, en la mayoría de las ocasiones, mejora con el paso del tiempo.