El sol, el mejor afrodisiaco
“Querido sol, sol, dame tu calor… ¡brilla!”. Esta conocida canción
infantil expone el cambio que llega tras el equinoccio de primavera.
Amanece más temprano, las puestas de sol son más tardías, las plantas
crecen más, salen las flores, las hormigas, las abejas, y todo lo que ya
sabemos. Y en España, como si no tuviéramos suficientes horas de luz
por la tarde, adelantamos el reloj para que no anochezca nunca.
¿Y por qué el sol tiene tanta influencia en nuestra libido? La
luz activa nuestro reloj biológico y no hay nada como la luz del sol
que es un afrodisiaco y antidepresivo natural que nos permite procesar
el 90% de la vitamina D. Por eso, muchos expertos
alertaron sobre las consecuencias biológicas de no salir de casa durante
la época pandémica: muchos no recibíamos suficiente luz directa del
sol.
En este sentido, un equipo de investigadores de la Universidad de Tromsø en Noruega liderados por Arne Holte sugirió en un estudio que las mujeres siguen a la luz con respecto al interés sexual concluyendo que abril y mayo son los periodos en los que las mujeres muestran mayor interés por el sexo, siendo diciembre el momento más bajo.
Hay que puntualizar, no obstante, que hablamos de un estudio de personas jóvenes en Noruega, donde los cambios de luz y temperatura son muy extremos entre el invierno y la primavera y su relación con la naturaleza es un poco diferente a la nuestra.